Por: Nohora Chandler (*)

En días pasados los medios de comunicación reportaron el caso de un hombre de la ciudad de Londres que había contraído el virus del SIDA en el 2003 y quien se había curado. Las preguntas se vinieron por montón: que si habían encontrado la cura para el SIDA, que si las personas infectadas podían tener acceso a esa medicina, etc.

Este ciudadano fue diagnosticado con SIDA y a la vez con un tipo de cáncer de la sangre y su condición era muy crítica en el 2016 por lo que los doctores decidieron hacer un trasplante de médula, un procedimiento de alto costo. A su vez, el donante de médula no era un donante cualquiera, era una persona que tiene en sus genes la capacidad de resistir el VIH, en otras palabras, no se infecta cuando está en contacto con el SIDA. Estas personas con la mutación genética llamada CCR5 viven en la Europa nororiental y tienen esta resistencia en su genética, es decir nacieron así.

Pero este no es el primer caso. En el 2007 en Alemania, un paciente de origen norteamericano recibió el mismo procedimiento de un donante de las mismas condiciones y fue curado del VIH. Sin embargo, los doctores aseguran que con estos dos casos no pueden tener conclusiones definitivas, pues no hay 100% de certeza que la médula de esa persona resistente haya sido la causante de la cura, pueden haber muchos otros factores que aún están en investigación médica.

Sin embargo, si una persona infectada con VIH quiere acceder a un trasplante de médula, tendrá que recibirla de un donante resistente, dos condiciones especiales que no se encuentran en todos los países ni que son de fácil acceso económico. Lo que aseguran los doctores es que ese procedimiento es costoso, complejo y riesgoso, y que hacer trasplantes con más personas requiere que sean compatibles con donantes que solo están en un área pequeña del planeta y que tienen esa mutación genética.

Si bien apenas son solo dos casos y bajo condiciones muy específicas, puede ser el inicio de la esperanza para quienes viven con el VIH. Las investigaciones pueden llevarlos al desarrollo de formas alternativas y de bajo costo que utilicen los logros alcanzados hasta este momento, pero eso dependerá de los recursos económicos que tengan para este tipo de investigaciones y de las personas con el CCR5 que quieran participar para encontrar la cura.

Hoy en día los medicamentos desarrollados en las últimas tres décadas le permiten vivir sanamente a las personas que tienen el VIH/SIDA, sin embargo la pesadilla para quienes viven con esta condición no es la misma enfermedad, sino el estigma y la discriminación que deben enfrentar cuando reciben un diagnostico positivo. Luego de 20 años de demostrar que las personas no se infectan de SIDA de manera casual, sino por contacto sexual o con sangre, el rechazo y señalamiento a quienes se infectan continúa siendo el mayor reto. Encontrando la cura para el SIDA, quienes tienen esta enfermedad tendrán alivio y podrán dejar de depender del medicamento.

Si tiene preguntas sobre el VIH/SIDA y las enfermedades de transmisión sexual, puede llamar a la Agencia Latina al (405) 919-2607 y su llamada es confidencial.

(*) Nohora Chandler es una periodista y Educadora en Salud de la Agencia Latina, en la Ciudad de Oklahoma